Ya es un deporte,  Lima
también viola la Constitución

por Ernesto Lloveras

San Juan se ha convertido en la única ciudad del mundo donde el ciudadano no puede manifestarse. El lunes 7 de febrero, en horas de la tarde, un grupo de personas intentamos cantar el Himno Nacional Argentino , en la zona de peatonal Tucumán y distribuir unos panfletos en oposición a la invitación del Gobierno de Gioja a la Embajadora del Reino Unido de Gran Bretaña para participar de la gesta Sanmartiniana del Cruce de Los Andes. Una protesta tranquila, pacífica y madura, fue prohibida por un grupo de Inspectores Municipales, quienes acompañados de personal policial fuertemente armado, argumentaron que el Sr. Jorge Cerdera y Marcelo Lima no habían autorizado dicha concentración callejera. Como ciudadano y Abogado intenté explicarles que en Democracia el poder de turno debe respetar la letra de la Constitución Nacional, en lo referente a las Garantías de Libertad de expresión y Derecho de Reunión y Petición a las Autoridades. Todo fue inútil. A pesar de la insistencia de varios ex combatientes de Malvinas, los enviados de la Municipalidad de la Capital amenazaron con detener a las personas que intentaran seguir repartiendo folletos; en los que sólo se recordaba la actitud inglesa de hundir el Belgrano a pesar de navegar fuera de la zona de exclusión; o de la rapiña inglesa en explotar el petróleo que encuentren en el Atlántico Sur; Y AHORA EN LA PROPIA CORDILLERA DE LOS ANDES; a través de varios proyectos mineros: Al final la protesta fue CENSURADA; y las Banderas Argentinas; tuvieron que guardarse; con la colectiva sensación de que el Gral: Galtieri se reía desde un oscuro laberinto del pasado entreguista.