Esto también es “Gestión Barifusa”:
Más de 400.000 pesos deben a
comercios y empresas de Jáchal
por Jorge Morales
En el proceso de “salvación mediática” que ha iniciado el gobierno municipal encabezado por Jorge Barifusa, podemos escuchar y ver spot en radio y televisión. En forma sistemática trata de hacer ingresar en el pensamiento del electorado que su gestión fue todo lo que cuenta recién en el último año de esta gestión, o casualidad, año electoral. Con una fuerte apuesta a la obra realizada con plata de la provincia, no resalta en ningún momento el dinero de las regalías o del fideicomiso. Internamente se conoce que al mencionar el fideicomiso estará “favoreciendo” (fue la palabra) a Mario Hernández con quien tuvo duros cruces en varias oportunidades.
Pero no solo eso es lo que cuenta en el haber de la “Gestión Barifusa”. Existe un problema sin solución y que ninguno de los que integra su equipo de trabajo, sea del lugar que sea, puede dar marcha atrás con la bronca y desconfianza que existe en gran parte del compre local.
No es la misma “celeridad y eficiencia” para pagar los expedientes que van hacia afuera y a determinadas “empresas”, que cuando se debe pagar a comercios, empresas o profesionales de Jáchal. Es más existe un caso en el que después de haber participado de la llegada de las candidatas en la Fiesta del Sol del año pasado, comieron en un local de la plaza y la promesa fue: “te pago el miércoles”, la comida fue el sábado anterior. Resultado: el comerciante después de un año de no poder cobrar, tuvo que enviar una carta documento a la Municipalidad para que le abonen lo que prometieron pagar en cuatro días. De esa sola manera pudo cobrar y encima debió participar de la “molestia” que había causado la carta documento al Intendente y compañía.
Pero dicen que “un botón sirve de muestra”; en este caso es un “sobretodo” con muchos botones:
La gestión Barifusa debe más de 400.000 pesos a comercios, empresas y profesionales de Jáchal que viven, trabajan, tributan y esperan todo el año.
Los famosos Centros Integradores Comunitarios (CIC) trajeron consigo la oportunidad de la creación de ingresos externos importantes al flujo financiero local. El tema es que si no se paga en término, el ingreso genera un problema inverso. Actualmente se debe más de 120.000 pesos de los CIC en Jáchal sin estar terminados ni funcionando. Además en el rubro de materiales para construcción existe una deuda de 45.000 pesos que es de larga data. Otra de las deudas de la actualidad tiene que ver con el transporte a las empresas que prestan servicio en nuestro departamento. Al día de la fecha la deuda asciende a más de 120.000 pesos (60.000 son de la gestión anterior); y en este rubro está incluido el viaje que se hizo desde Jáchal a Albardón para recibir a la presidenta (entre otros).
Otra de las deudas tiene que ver con servicios sociales impagos y que trepa a la no menor cifra de 110.000 pesos, con algunos “agregados”.
El rubro que despierta más curiosidad es el de las empresas de medios de comunicación. A uno de ellos le deben casi un año (11 meses) con una deuda a favor de la empresa de 42.9000 pesos. A otra, medio radial, le deben desde julio del año pasado y eso está cercano a los 5.600 pesos. Esto también es gestión Jorge Barifusa.
Ahora quien lea esta nota puede decir ¿por qué no deber? ¿Puede que tenga problemas financieros? ¿Que no venga nunca la contadora? ¿Que se priorice el pago a amigos del actual gobierno? ¿Qué se pague a empresas de afuera antes de entregar la mercadería? ¿Que haya algunos que son parte de empresas que negocian con el Estado departamental? ¿Que se apriete a gente para que “voluntariamente” asista con algunos “reintegros” previos al pago? Todas estas preguntas las debe hacer el electorado al momento de tener a los funcionarios en la puerta de sus casas cuando comience la campaña de la re elección de Jorge Barifusa. Es un buen momento para preguntarle por qué se debe y cuál es el criterio para no pagar de la misma forma a los de afuera como a los de adentro.
“Los ladrillos también se hacen con bosta”
Está es una frase que inmortalizo el líder natural del Justicialismo, Juan Domingo Perón, al momento de justificar la participación de dirigentes que no eran muy afín a la ideología que comulgaban, pero que eran necesarios dentro del movimiento.
En este caso los ladrillos son ladrillones y no tienen “buen olor”. Para la construcción de los seis CIC de Jáchal se realizó una compra aproximada de 190.000 ladrillones. El Concejo Deliberante aprobó la compra directa en un, por lo menos, dudoso procedimiento legislativo. No estuvieron todos los concejales presentes y sabemos los nombres de los que no estuvieron, pero esperamos que ellos salgan a decir qué pasó con esa aprobación.
Los ladrillones fueron comprados fuera de Jáchal y si uno visita los CIC puede ver que terminada la construcción existe un sobrante importante de ladrillones que no se sabe el destino que tengan. Ahora por qué no se compró en Jáchal siendo que hay empresas que venden ladrillones y son proveedores de la Municipalidad. O sea, se puede deducir que cuando hay plata se paga bien a empresas de afuera, y se las tiene como la “zanahoria y el burro” a los comerciantes jachalleros.
Esto es bueno que la “Gestión Barifusa” lo explique y que tenga la misma “velocidad” para pagar al compre jachallero como lo tiene para pagar a comercios y empresas de afuera.